Seguinet, como lo conoce todo el mundo, Joan Campomar (Antonio), es para nosotros sinónimo de esfuerzo y trabajo ya que gracias a él, hemos podido atravesar fronteras y darnos a conocer en toda España.
Desde adolescente aprendió este oficio artesanal, hasta el punto que el ayuntamiento le encargó las sombrillas de carritx de las playas, ya que antiguamente se hacían de tela poco resistente y causaban accidentes en los días de viento en la playa. Encargos que siguen vigentes en la actualidad.
Además de su función de sombra robusta y duradera, tienen un encanto inimitable por los materiales industriales actuales.